Al igual que las interminables horas de entrenamiento, la dieta y los complementos alimenticios, la preparación mental también es importante en el deporte en general y en el entrenamiento con pesas en particular. En esta perspectiva, los entrenadores profesionales inventaron la técnica de la visualización, que actualmente se pone en práctica, especialmente durante las grandes competiciones. La visualización se utiliza en los deportes de alto nivel para mejorar el rendimiento de los atletas, y en el campo de la musculación, permite ir más allá de los límites si se utiliza sabiamente.
¿Qué es la visualización?
La visualización es una técnica que se utiliza desde hace décadas en el mundo de las grandes competiciones. En la mayoría de los casos, el fracaso de un deportista no se debe a un mal entrenamiento o a una falta de capacidad física o técnica. La mayoría de las veces se debe al nerviosismo y a la falta de concentración durante los entrenamientos o la competición. Para evitar la falta de concentración, el deportista debe aprender, durante su entrenamiento, a gestionar sus emociones, a controlarse para enfrentarse mejor a su adversario. En esta perspectiva, aprende a generar imágenes mentales de sus actuaciones, utilizando la técnica de visualización para reforzar el poder de la fuerza mental del atleta.
Junto con la imagen mental, la visualización es una técnica que forma parte de la psiconeuroinmunología. Ambos utilizan métodos cómo la meditación o la hipnosis para tratar al deportista en cuestión. La visualización trabaja sobre la mente y el espíritu del deportista para ayudarle a concentrarse y a gestionar sus emociones imponiendo imágenes precisas en la mente. Se cultivan en la mente imágenes mentales de éxito, bienestar y logros. Les enseñamos a gestionar el miedo y el estrés para que los deportistas puedan tener confianza en su rendimiento.
Visualización: ¿cuáles son sus ventajas?
La visualización se utiliza para reducir el estrés y la ansiedad de un atleta o deportista de alto rendimiento. Combinado con otras técnicas similares, también puede mejorar los problemas de salud relacionados con el estrés, como la hipertensión, la artritis o los ataques al corazón. Al concentrarse en imágenes agradables y placenteras, el deportista, relajado, consigue reducir la sensación de dolor que su cuerpo haya podido experimentar. Dolor de espalda, migraña, calambres...son diferentes enfermedades que se pueden curar con la técnica de la visualización.
La pantalla también ayuda a mejorar las funciones motoras del deportista. De hecho, estudios científicos han llegado a la conclusión de que el entrenamiento virtual puede ser tan eficaz como el real, especialmente cuando se trata de inculcar habilidades motoras a un paciente o a un deportista.
Por último, la visualización desarrolla la confianza del deportista en sí mismo. Acostumbrado a imaginar victorias y éxitos, el deportista gana confianza y llega a creer que puede tener éxito en lo que va a hacer. Su mente está en su nivel más alto, y le será mucho más fácil enfrentarse a su oponente con menos ansiedad y miedo. En el ámbito de la musculación, la visualización ayuda a activar las neuronas. La combinación de la visualización con un ejercicio o sesión de entrenamiento permite ganar más fuerza que el entrenamiento por sí solo. El atleta también mejora su precisión y concentración.
¿Cómo funciona la visualización?
Durante una sesión de visualización, el deportista recibe una estimulación nerviosa. Intentamos desarrollar la propagación de un mensaje relevante, en relación con lo que queremos transmitir y hacer creer al paciente. Puede ser una repetición de movimientos, una simulación de victoria...Trabajamos el control nervioso para mejorar la ejecución del gesto motor en cuestión. En el mismo enfoque, también tratamos de desarrollar la fuerza a través de un mejor reclutamiento muscular, porque es la fuerza la que permite un mejor reclutamiento de las fibras musculares. Una vez reclutadas y estimuladas las fibras musculares, el deportista podrá levantar más peso para una masa muscular equivalente. Siempre es importante tener en cuenta que la visualización te permite trabajar tu fuerza y tu mente. Es a través de un entrenamiento intenso combinado con sesiones de visualización como se puede desarrollar la masa muscular.
¿Cuáles son los pasos de visualización?
Para que una sesión de visualización sea beneficiosa, hay que seguir ciertos pasos.
Primer paso: el atleta debe instalarse cómodamente y relajarse. Debe pensar en nada y despejar su cabeza y su mente. Cerrando los ojos, intenta concentrarse en su respiración durante unos instantes.
Segunda etapa: el deportista imagina su entorno y el ambiente que acostumbra a frecuentar (pabellón, equipo, compañeros...)
Tercer paso: se imagina a sí mismo preparándose y calentando para el entrenamiento, o para una competición de alto nivel. El entrenador o la persona que le asiste durante la visualización puede ayudarle describiendo con detalle ciertos elementos de su entorno. Si el deportista está acostumbrado a la visualización, no tendrá ningún problema para visualizar su entorno, pero para un principiante, siempre es mejor contar con asistencia para optimizar los resultados de cada sesión.
Cuarto paso: el atleta trata de visualizar cada movimiento que tiene que hacer en su disciplina, desde la posición de salida hasta la posición de llegada. Debe tratar de vivir la película mental de la acción, como si la estuviera realizando realmente. Todas las acciones deben ser visualizadas a alto nivel durante cada sesión. Si una acción no le viene bien al deportista durante la sesión, no hay que tener miedo a interrumpirla o a rebobinar la película mental. El atleta reflexiona sobre cada una de las dificultades encontradas con el fin de aportar soluciones para rectificar el tiro. De una sesión a otra, hay que intentar aumentar el nivel de dificultad encontrado. En el entrenamiento con pesas, se puede, por ejemplo, visualizar el peso virtual de las cargas, el número de series o la velocidad de ejecución.
