La denominación de las hormonas llamadas "machos" o "hembras" es un término inapropiado. Estas hormonas están presentes tanto en los hombres como en las mujeres, pero en diferentes concentraciones, en consecuencia, el estrógeno también forma parte de las secreciones masculinas, pero en un valor infinitesimal en condiciones fisiológicas normales. Obviamente, hay formas de patología que invierten estas concentraciones y alteran el aspecto interno o externo del individuo. El estrógeno es la hormona responsable de la reproducción y de la aparición de los caracteres sexuales secundarios en la mujer.
Las propiedades fisiológicas de los estrógenos
Existen diferentes tipos de hormonas femeninas (estradiol, estradiol, estriol...) que se incluyen en el término estrógeno. Al igual que la hormona masculina, esta secreción se origina en las gónadas femeninas, por lo tanto, se produce principalmente en los ovarios, las células grasas y las glándulas suprarrenales. La producción de la hormona aumenta considerablemente a partir de la pubertad y no disminuye hasta cierta edad.
Los estrógenos son los responsables del desarrollo de las mamas, del aumento de las caderas, del vello púbico, axilar y de la menstruación. Esta hormona esteroidea regula los distintos fenómenos fisiológicos de la mujer, concretamente el metabolismo óseo y el crecimiento muscular, por eso las mujeres tienen una cintura más fina y menos desarrollada que los hombres.
Los efectos de la hormona en función de los niveles corporales
El estrógeno no sólo es responsable del desarrollo de las características sexuales en la mujer. La secreción también tiene un efecto sobre la percepción y las emociones de la persona. Estas características varían según el nivel de estrógeno establecido por el órgano sexual. Debes saber que el nivel de hormonas que contiene el cuerpo de la mujer fluctúa en función de la situación. La producción tiende a aumentar durante la pubertad y el embarazo, tiende a disminuir durante la menopausia, con una pérdida de peso considerable o una disminución del tejido graso.
Esta hormona debe estar en el rango normal de concentración en las mujeres, ya que promueve cambios importantes en el cuerpo. Se habla sobre todo de masas tumorales estimuladas por el exceso de producción de la hormona femenina o la fertilidad, debido a los bajos niveles de estrógeno. En el caso de periodos irregulares, sofocos, sudores nocturnos, insomnio, sequedad vaginal, disminución de la libido, irritabilidad, dolores de cabeza y sequedad de la piel, los niveles de estrógenos pueden ser bajos, en todos los casos, el estrógeno se considera una potente hormona que puede ser tanto perjudicial como beneficiosa para la salud.
Los hombres y sus niveles de estrógeno
La producción de estrógenos no es útil para los humano, por eso su concentración es mínima, sin embargo, hay situaciones en las que los seres humanos no son capaces de aumentar su masa muscular de forma adecuada a pesar de los prolongados ejercicios y rituales de construcción muscular. La consecuencia visible de una mayor cantidad de estradiol en el cuerpo del hombre es el crecimiento anormal del tejido mamario: la ginecomastia. Esta anomalía se produce cuando los niveles de testosterona disminuyen, entonces el nivel de estrógenos aumenta para feminizar al hombre (un ligero cambio en la forma, el tono, el comportamiento femenino, el aumento de la susceptibilidad, etc.), pero también una pérdida de músculo y un desarrollo más o menos marcado de las mamas, una acumulación de grasa abdominal, una pérdida de la libido, de la virilidad y un mayor riesgo de enfermedades de la próstata.
Reducción de los niveles de estrógeno en hombres o mujeres
Es importante saber que muchas sustancias químicas que circulan en nuestro entorno y en nuestra alimentación son responsables de los efectos del estrógeno en nuestro cuerpo. Se denominan "xenoestrógenos", que son estrógenos extraños que provienen del exterior del organismo, por lo tanto, es importante evitarlos en la medida de lo posible, se encuentran sobre todo en los envases o en la mayoría de los productos de plástico, detergentes y productos de limpieza, en pesticidas y fertilizantes químicos. Estos son algunos consejos :
- Has ejercicio con regularidad: la construcción de músculos estimula la producción de testosterona y ésta contrarresta los efectos del estrógeno, esto se debe a que los niveles de testosterona y estrógeno están interrelacionados (cuando uno aumenta, el otro disminuye), esta práctica debería ser eficaz si la producción de testosterona sigue estando dentro de la norma.
- Evita los xenoestrógenos (productos químicos con efectos estrogénicos) como los pesticidas y otros productos químicos domésticos, especialmente los insecticidas en aerosol. Presta atención al uso de estos productos tóxicos en tu vida diaria y reduce los riesgos de variación hormonal.Cuidado con los plásticos: no caliente en el microondas alimentos en platos de plástico, evite dejar agua en botellas de plástico en el coche.
- Evite los medicamentos que aumentan el estrógeno o disminuyen los niveles de testosterona, como los bloqueadores de los receptores H2 (Tagamet, Zantac), las benzodiacepinas (Valium, Xanax), algunos medicamentos para el corazón (Lanoxin, Norvasc) y algunos antibióticos (Ketoconazol, Metronidazol).
- Disminuir la grasa abdominal: la testosterona se convierte directamente en estrógeno en la grasa abdominal por la acción de la enzima aromatasa. No es una coincidencia ver pechos prominentes debido al desarrollo de las mamas en los hombres obesos.
- Limitar el alcohol: un bajo consumo de alcohol puede aumentar los niveles de testosterona, por otra parte, el consumo excesivo de alcohol aumenta la cantidad de estrógenos en el torrente sanguíneo.
- Comer carne ecológica, el ganado industrial es tratado con estrógenos antes del sacrificio, lo que hace que engorde y retenga agua. La carne ecológica de animales alimentados con hierba es excelente para aumentar su nivel de testosterona: contiene algo de colesterol, algunas grasas saturadas y todos los aminoácidos esenciales. La carne procedente de la ganadería industrial e intensiva contiene trazas de estrógenos