Descubierto en 1827 en la bilis de toro por dos investigadores austriacos F.Tiedermann y L.Gmelin, desempeña un papel importante en el cerebro (neurotransmisor) y en otros tejidos eléctricamente excitables (corazón, músculos, vesícula, retina, sistema vascular). Se encuentra en grandes cantidades en el cerebro (bulbo olfativo e hipocampo), el corazón, los músculos y la retina.
También interviene en la digestión de los lípidos aumentando el metabolismo hepático de las grasas. Estimula la formación de taurocolato (ácido biliar) que aumenta la excreción de colesterol por la bilis.
EFECTOS PRINCIPALES
- Protege la retina
- Control de la degeneración macular y otras enfermedades oculares graves
- Fortalece el músculo cardíaco (contractilidad)
- Disminuye la presión arterial
- Antiarrítmico
- Fortalece la función de desintoxicación del hígado
- Ayuda a la eliminación del colesterol
- Esencial para la absorción de grasas
- Antioxidante
- Tranquilizador
- Efecto epiléptico
- Disminuye la acumulación de ácido láctico
- Mejora la movilidad del esperma
ELEMENTOS COACTIVOS Y METABÓLICAMENTE ÚTILES
Minerales: Zinc - Manganeso
Vitaminas: B6 - A
Aminoácidos: Cisteína
AGPI (Ácidos grasos poliinsaturados): DHA o ácido cervónico - EPA (ácido eicosapentaenoico).
EXCESO
Riesgos de úlceras al estimular la secreción de ácidos gástricos y, en particular, al aumentar el efecto ulcerogénico de la aspirina.
FUENTES DE ALIMENTACIÓN
Carne roja, huevos, leche y productos lácteos, algas, setas, ostras, pescado.