El triptófano es uno de los siete aminoácidos esenciales, es decir, debe ser aportado por la alimentación porque nuestro organismo no sabe sintetizarlo. Se trata de un aminoácido aromático (como la fenilalanina y la tirosina) que es a la vez raro (1% de los aminoácidos presentes en las proteínas) y muy frágil.
Precursor de la serotonina, la melatonina y la niacina (vitamina B3), el triptófano es un agente calmante, antidepresivo e inductor del sueño.
Descubierto en 1901, se ha utilizado durante muchos años para combatir la depresión, favorecer la pérdida de peso y el sueño.
En lo que respecta a la pérdida de peso, se sabe que el estrés puede llevar a algunas personas a consumir grandes cantidades de hidratos de carbono que provocan una sensación momentánea de bienestar, pero que desgraciadamente aumentan la ingesta de calorías y favorecen el almacenamiento de grasas. Tomar triptófano o 5-HTP (5-hidroxitriptófano) puede mejorar el estado psicológico y evitar el sobrepeso.
El triptófano estimula la liberación de la hormona del crecimiento y ayuda a la formación de linfocitos esenciales para el sistema inmunitario.
Los BCAA y otros aminoácidos aromáticos (tirosina y fenilalanina) compiten con el triptófano en la entrada al cerebro.
SEROTONINA
Amina presente en la mayoría de los tejidos del cuerpo, actúa como mediador químico. Desempeña un papel fundamental en múltiples funciones, especialmente en el control del apetito y del estado de ánimo, así como en la depresión y la ansiedad.
En el cerebro, el triptófano se transforma tras su hidroxilación en 5-HTP (5-Hidroxitriptófano) para dar serotonina.
TRIPTÓFANO: EL RETORNO
En Estados Unidos, en 1989 el triptófano fue implicado en una epidemia de una nueva enfermedad: el síndrome de eosinofilia-mialgia. Esta enfermedad causó la muerte de 37 personas y dejó discapacitadas a más de mil. La empresa japonesa Showa Denko, responsable de la comercialización de este complemento alimenticio producido mediante la manipulación genética de una bacteria, y a raíz de una mala filtración que dejó pasar un contaminante, es en efecto la verdadera causa de lo que ha llevado durante unos quince años al desarrollo de un nuevo producto, Showa Denko.años después de la prohibición del triptófano como suplemento dietético...No podemos ignorar el hecho de que esta prohibición se produjo al mismo tiempo que el lanzamiento del Prozac...así que...
Ahora se sabe que el triptófano no puede estar implicado en el síndrome de eosinofilia-mialgia y que era un metabolito tóxico.
